jueves, 12 de febrero de 2009
ARMADA 17
Moros en la Costa. Lepanto. Epoca del Emperador Carlos V.
La lucha de España (y de la Europa Cristiana) contra la supremacía naval del Imperio Otomano en el Mediterráneo es digna de comentarios más precisos. Porque este período de la historia es uno de los más interesantes para entender la evolución de la Armada Española como institución de primer órden. Esta lucha tomó auge durante el reinado de Carlos I de España (que era a su vez el Emperador Carlos V del Sacro Imperio Romano Germánico) (*) y continuó llevándose a efecto por largo tiempo hasta que (ya reinando Felipe II), una flota perteneciente a la coalición cristiana llamada la Liga Santa ( formada por España, Génova, Venecia. Portugal, Malta y la Santa Sede) pudo obtener un claro triunfo sobre la armada del Imperio Otomano (**) en la tercera batalla de Lepanto (7 Octubre de 1571), lográndose por fin detener el impulso expansionista de los turcos y sus aliados del norte de Africa, quienes asolaban las costas del Mediterráneo. El término "moros en la costa" muy generalizado en la Península, data posiblemente de aquella época. La flota cristiana coaligada, estuvo comandada en jefe por el español Don Juan de Austria (***), mientras que la parte española de ella estuvo dirigida por los famosos marinos Alvaro de Bazán, Luis de Requesens y Juan Andrea Doria, cada uno de ellos al frente de sus respectivas escuadras.
Reinado de Felipe II. Guerra contra los Otomanos.
Al desaparecer Carlos I en 1588, heredó el trono de España su único hijo legítimo Felipe II. Con el trono de España solamente (porque el de Alemania fué heredado por Fernando I de Habsburgo, hermano de Carlos V), Felipe heredó también las inmensas responsabilidades de conducir la administración de medio mundo.El reino de España navegaba en una multiplicación de conflictos, unos más graves que otros, siendo necesario atenderlos todos y cada uno de ellos por separado. Felipe, rey absolutista, terco y arbitrario, demostró empero tener la capacidad para hacerlo. Por ejemplo, el conflicto del Mediterráneo con los turcos fué uno de ellos y posiblemente requería todo el esfuerzo del soberano para solucionarlo, cosa que consiguió en Lepanto-como yá se há explicado-al coaligarse con el Papa y los venecianos, logrando en esta forma arrebatar - por fin- a los otomanos el dominio del mar, vale decir casi el dominio de toda Europa, que éstos habían estado ejerciendo desde los tiempos de la caída de Constantinopla en el siglo anterior (1453). Dos batallas anteriores en el mismo escenario de Lepanto habían terminado en lamentables derrotas para los cristianos. Los terribles "piratas" Barbarroja a quienes señala la historia, eran dos famosos almirantes de la flota otomana, hermanos entre sí, que en sus correrías de corsarios a las órdenes del Sultán de Turquía, muchas molestias llegaron a causar entre las comarcas cristianas situadas en las riberas del Mediterráneo.
Reinado de Felipe II. Guerra contra los ingleses.
Resuelto parcialmente el problema en el Mediterráneo, fué necesario entonces concentrar la atención en otros problemas puramente europeos, especialmente aquellos derivados de la rivalidad generada por intereses coloniales contrapuestos, entre países vecinos y sus evidentes deseos de predominar en los nuevos territorios de América, que España proclamaba como suyos, por haberlos descubierto y encontrarse ahora en pleno proceso de conquista y colonización.
El rey Felipe había estado casado por conveniencia política con su prima María Tudor, reina de Inglaterra instauradora y defensora a ultranza del catolicismo en ese país. (María era hija legítima de Enrique VIII Tudor y Catalina de Aragón, la hija de los Reyes Católicos).
Habiendo fallecido María Tudor sin herederos, subió al trono su media hermana Isabel Tudor (que en adelante llamaremos Elizabeth) hija también de Enrique VIII y de la infortunada Ana Bolena. A Elizabeth se le consideraba sin derecho al trono por ser hija ilegítima. Las preferencias de los ingleses católicos y el toque de legitimidad estaban del lado de su prima María Estuardo (Stuart) de Escocia.
Elizabeth I se impuso a la fuerza y acto seguido por Real Decreto reimplantó radicalmente el anglicanismo protestante como religión oficial de Inglaterra, con ella como cabeza visible de la Iglesia, grave decisón ésta que llegó a provocar la automática inconformidad del Papado y de España , país considerado como el campeón protector del catolicismo en Europa. La ejecución de María I Estuardo , reina de los escoceses como clara venganza por pretender ocupar el trono de Elizabeth I, constituyó un suceso de alta política, un hito que convertiría ambos reinos (España e Inglaterra) en entidades irreconciliables aparentemente por razones de intolerancia religiosa y por algunas otras intrigas no aclaradas. Este manifiesto rechazo de España hacia el sesgo religioso de los ingleses, se equilibraba con el desprecio marcado de los ingleses hacia todo lo que fuera o pareciera español. No existía por ahora un estado formal de guerra entre ambas naciones, pero la beligerancia entre ellos era muy significativa. Inglaterra observaba con profunda envidia , la abundancia de riquezas que los españoles recogían de sus colonias.El oro y la plata fluían desde las colonias a la metrópolis en grandes cantidades. Las flotas de galeones iban y venían a su antojo, desde y hacia las colonias. Sevilla con su llamada Casa de Contratación era el centro de recepción de todas esas riquezas que producía el Nuevo Mundo. La Corona Española o el Imperio Español como comenzaba a llamársele, se enriquecían rápidamente gracias a los ingresos que proveía la explotación de sus ricas comarcas , y las transacciones comerciales en general, pudiendo ahora contar con fondos suficientes para invertir en mejorados proyectos y en grandes conquistas. En cambio, las colonias inglesas en norte América no producían sino gastos, ruina y decepciones. Las tierras de Virginia, Massachussets y las Carolinas no resultaban aptas para la agricultura y tampoco para la cría, ni siquiera producían minerales de valor que pudieran despertar el interés de inversores europeos. Si acaso producían tabaco, brea, maderas de dudosa calidad y escasos recursos (pieles etc.) que por lo general eran arrebatados a los empobrecidos pueblos indígenas.
(*) El Sacro Imperio Romano Germánico.
"Heiliges Römisches Reich" o "Sacrum Romanum Imperium" se llamó a la unión política de muchos estados de Europa Central a partir de la Edad Media. Fué fundado por Carlomagno ( Karl der Grosse) en el año de 962 y se mantuvo vigente hasta el año 1806, cuando resultó disuelto por decisión de Napoleón, posterior a la renuncia del último emperador Francisco II.
(**) La armada turca y su historia.
Turquía es considerada históricamente como una de las mayores potencias marítimas de la antigüedad. Llegaron a ejercer un total dominio en el Mediterráneo, en el Mar Negro, en el Mar Rojo, en el Golfo Pérsico, en el Océano Indico y tuvieron marcada influencia en las rutas del Atlántico Norte, y en lugares distantes como la India, Indonesia y Malasia. Fueron protagonistas de la primera batalla naval de Lepanto en 1499, de la segunda batalla de Lepanto en 1500 y la más famosa , la tercera batalla de Lepanto en 1571 al enfrentarse las flotas aliadas de Venecia, Génova, Malta, Portugal , los Estados Pontificios y España, bajo el mando de don Juan de Austria. Esta vez fueron derrotados, pero en las anteriores habían sido vencedores indiscutibles. Uno de sus almirantes más renombrados fué Hayr-ed-Din Pachá, conocido como "Barbarroja"por los europeos, debido al color zanahoria de su barba. Este marino había derrotado nada menos que al gran Andrea Doria en varias oportunidades (Penos, Preveza y Argel). Los éxitos navales de Turquía les permitieron mantener una presencia dominante en el norte de Africa por más de cuatro siglos. Sus campañas fueron innumerables y muy atrevidas. Bajo el mando del corsario Murat Reis llegaron a ejecutar incursiones guerreras en las costas atlánticas de España, Portugal, Francia, las Islas Británicas, las Islas Shetland, las Islas Faröe y en las costas de Dinamarca, Suecia, Noruega, Islandia, Groenlandia y Newfoundland, entre los años de 1627 y 1631.
(***) Don Juan de Austria.
Fué un notable militar y diplomático español, hijo natural del Emperador Carlos V, nacido en la ciudad de Ratisbona (Regensburg) en 1545. Durante el reinado de su medio hermano Felipe II, ejerció cargos de mucha importancia, el más notable y reconocido fué su nombramiento como comandante en jefe de la flota cristiana coaligada que combatió en la tercera batalla de Lepanto. Lograda la victoria sobre los otomanos, se convirtió en héroe popular y consentido de toda Europa. Su mayor hazaña fué el haber liberado a más de 15000 cristianos prisioneros de los turcos, que antes habían estado sometidos a una cruel y perpetua esclavitud en las galeras.
Nota: No se debe confundir con el otro Don Juan José de Austria (1629-1679) hijo bastardo de Felipe IV y la actriz María Calderón.
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