viernes, 30 de abril de 2010

ARMADA 93



Evacuación definitiva de Guayana. Combate de Cabrián. Persecución Naval
La Torre tomó una final decisión. Esta vez procedería a evacuar a todos los efectivos españoles paisanos y militares guarecidos en las fortalezas abriéndose paso con los buques a través de la barrera instalada por Brión.
El 1º de agosto muy temprano comenzaron a cargar los buques. El día 2 de agosto se terminó el embarque de los equipos y en la noche del mismo día se procedió con mucha cautela a embarcar parte de la tropa que había llegado de Angostura.
Los patriotas se dieron cuente de la maniobra,un fugado les llevó la noticia. Esa misma noche atacaron masivamente a los puestos avanzados, no lograron ningún progreso porque fueron contenidos allí con fuego muy nutrido.
A media mañana del 3 de agosto de 1817 se terminaron de evacuar los últimos soldados que guarnecían los castillos, y al anochecer comenzó el embarque generalizado del personal civil, en forma mas o menos organizada bajo la dirección personal del mismo La Torre, quien con su presencia trataba de conservar la disciplina y el órden.

La Torre dá la órden de partida.
Terminado el embarque se dió a la escuadra realista la órden de partida. Reforzada ahora con los buques del apostadero de Guayana se veía más fuerte y más poderosa. Contaba ahora la escuadra con una corbeta (la “Merced”)( * ), ocho goletas, un bergantín (el “Casanova”), una polacra (la “Carmen”), un guairo, una balandra, seis cañoneras, cuatro flecheras una bombarda y mas de doce buques de transporte mayores y menores.
Desde el inicio se adoptó una formación de dos columnas paralelas,colocándose los barcos artillados a la derecha para cubrir y proteger a los buques desarmados que avanzaban en la columna de la izquierda.
Los castillos fueron ocupados el mismo día por las tropas patriotas al mando del general José Antonio Anzoátegui.

La desbandada de Cabrián.
En lo más estrecho del canal frente a Punta Cabrián,se encontraban alineados como jauría, los buques de la escuadra de Brión esperando confiados pero alertas el inevitable acercamiento de la flotilla realista, para finalmente abalanzarse sobre ella con todo su poder de combate.
El interés de los realistas (como era lógico) no estaba esta vez centrado en combatir,sus intenciones eran escapar lo mejor posible de ese infierno y la única manera era infiltrándose por el centro de la línea patriota,tratando de encontrar a toda costa,una salida expedita por cualquiera de los brazos del delta.
Por voluntad de los patriotas, los transportes y otros buques menores fueron dejados pasar sin mayores restricciones, pero los buques de guerra sí que fueron atacados con fuego por su frente y por su costado derecho(cubierto totalmente por el fortín). Los realistas no se mostraron indiferentes ni ociosos, también supieron contestar el fuego con apropiada eficiencia y con gran intensidad.
Allí en Cabrián se empeñó la lucha. El buque insignia de los realistas llevó el peso mayor del combate,la corbeta “Merced” (algunos la llamaban fragata), recibió muchos impactos de la artillería patriota,resultando gravemente herido a su bordo el comandante de la escuadra, capitán de fragata don Fernando Lizarra (perdió las dos piernas), también el capitán Sunoca(patrón de la corbeta mercante) gravemente herido y muchos tripulantes más.
Sobre éste jefe (Lizarra-un marino profesional) recaía la total responsabilidad de la operación naval,una acción que pese a presentar muchas fallas logró su cometido de salirse de la trampa. Al ser herido, parece que se perdió la temporalmente la cadena de mando, no hubo quien tomara la sucesión oportunamente, tal vez por fallas de comunicación o porque no hacía falta. Para colmo o para ventaja, un gran temporal se desató durante casi todo el día, provocando que el esquema táctico de ambos lados se desorganizara notablemente.
Como no se había establecido un código de señales( * ) que fuera aplicable en plena "melee", no fue posible restablecer la disciplina entre tanta confusión reinante.
Muy difícil fué que Lizarra (o cualquier otro) pudiera a distancia controlar a los capitanes de los transportes, quienes por regla general eran personas civiles, muy poco acostumbrados a las acciones de guerra y menos a las disciplinas de convoy, ademas de viajar repletos “hasta el tope” con emigrados civiles (hombres, mujeres y niños) aterrorizados y enfermos, que ante el fragor de la batalla,que era algo novedoso y desconocido para ellos, solo alcanzaban a gritar enloquecidos presas de un pánico atroz, interfiriendo gravemente en las maniobras evasivas que intentaba efectuar la tripulación.

Sálvese quien pueda.
A falta de otro recurso,los capitanes optaron por lo que en esos momentos era más aconsejable, buscar su salvación en una huída desaforada por donde fuera posible hacerlo, en lugar de procurar su seguridad como há debido ser, pegándose muy cerradamente a los buques grandes de guerra que con su artillería habrían podido ofrecerles una razonable protección, tal como habían sido las instrucciones previas .
Los buques menores que se quedaron rezagados, fueron cacería fácil para las flecheras de los patriotas, que como es natural mostraban un especial interés por adueñarse del cargamento que aquellos tansportaban.

Persecución sin tregua hasta el mar.
Además del combate en Cabrián donde los patriotas lograron apresar un bergantín y tres goletas, la persecución continuó sin tregua durante todo el día y durante la noche del 3 de agosto.
Frente a la isla de “Tórtola”, dos buques de Brión atacaron de nuevo a la corbeta insignia “Merced”, a la polacra “Carmen” y a otros pequeños buques (flecheras) que les servían de escolta. Otro violento encuentro se produjo frente a la isla de Sacupana el día 4 de agosto,otro en Imataca, y otro en Boca Grande, frente al promontorio de Punta Barima.
Aún después de cruzar la barra y salir al mar, el hostigamiento continuó incesante. Los patriotas lograron capturar las goletas “Baguier” y “Dolores”, que fueron remolcadas más tarde a la bahía de Cabrián.
El total del botin apresado por la escuadra de Brión fue inmenso, incluyó a “grosso–modo” 14 buques entre mayores y medianos, muchas embarcaciones menores, 73 cañones, 330 fusiles, y una considerable cantidad de dinero de plata y oro, que se dice había sido propiedad de los misioneros de Guayana y que se intentaba extraer del lugar.
A pesar del caos reinante y la dureza de los combates,una gran parte de la escuadra realista y el convoy con la emigración,lograron aunque muy golpeados, abrirse paso hasta el mar. Más adelante veremos cual fué su destino posterior.

Pérdidas realistas.
Las bajas realistas en estos encuentros fuéron de 280 muertos y 300 heridos.Unos173l efectivos quedaron bajo custodia,en calidad de prisioneros de guerra.No existe conocimiento del destino de dichos prisioneros, pero aparentemente la gran mayoría de ellos, siendo criollos fueron incorporados como reclutas en el ejército republicano o como marineros muy necesitados en la escuadra de Brión,sin necesidad esta vez de practicar crueles ejecuciones. El gobierno de la República se estabilizaba considerablemente en Angostura, designada capital, mientras que el control del río Orinoco quedaba -desde ahora- garantizado por el Almirantazgo.


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jueves, 29 de abril de 2010

ARMADA 92






Angostura- La Catedral- Familia mantuana.




De Angostura a Los Castillos- Evacuación Realista. 1817
Los auxilios solicitados al general Morillo por los sitiados, no terminaban de llegar y aparentemente no llegarían jamás. No había ya nada de comer para la tropa, a estos males se agregaba la aparición del temido “vomito negro” (la fiebre amarilla) que hacía morir a muchos habitantes cada día. Las condiciones se hacían intolerables de hora en hora y no se preveían salidas a mediano plazo, a menos que se tomaran algunas decisiones desesperadas.
En efecto el brigadier La Torre se decidió a actuar. Convocó a las personalidades más influyentes de la ciudad (una junta de notables que procedió a reunirse secretamente en su comando) y les planteó la grave situación. Presentes estaban el gobernador coronel Lorenzo Fitz-Gerald, el Alcalde, el Comandante del Apostadero de Marina, Francisco Echeverría y los demás jefes importantes. Después de extensas deliberaciones, se llegó a la conclusión de que era necesario evacuar la plaza, para dirigirse a las fortalezas de Guayana. Así se podría reforzar la defensa de ellas y en cierta forma mejorar la situación de los pobladores de Angostura al permitir que la ciudad fuera ocupada por el enemigo, cesando con eso el largo asedio y trasladando a los nuevos ocupantes las muchas dificultades de atender a una población civil sumida en la más completa miseria. Una vez que arribaran a las fortalezas de Guayana, donde se esperaba que los recursos fuesen un poco mas abundantes, se podría entonces resolver lo más conveniente para los intereses realistas. Lo importante por ahora era salir de esa trampa que era Angostura ahora, y poder concentrarse en un solo problema.
Se ordenó eso sí, mantener el más absoluto secreto sobre estos planes, con la expresa recomendación de no hacerlos conocer a las tropas para evitar deserciones y otros inconvenientes,como sería por ejemplo la reacción de los "particulares" (como se llamaba antes a la población civil) al saberse entregados a los enemigos insurgentes. Muchos de los soldados realistas tenían a sus mujeres y a sus hijos viviendo en la ciudad, a ellos se les mintió deliberadamente, informándoles que la salida era apenas una operación táctica de corta duración contra un enemigo debilitado y que pronto estarían de regreso a su guarnición. Es obvio que la mayoría de la tropa no llegó a creer esa mentira, por eso los que se embarcaron lo hicieron con mucha angustia y a regañadientes, solo obedeciendo la órden por pura disciplina.
Se reunieron y alertaron todos los barcos disponibles en puerto( el 16 de julio), los cargaron con todo el parque disponible y con todo aquello que consideraban de importancia militar para ser llevado con ellos en la retirada. Nada útil debía ser dejado atrás, o se llevaba consigo o se destruía totalmente.

Pánico entre la población .
La población civil se alarmó (cundió el pánico) y se produjeron precipitaciónes exageradas entre ellos, principalmente por el temor muy fundado de no poder encontrar lugar en los barcos atiborrados apresuradamente.
Los cañones fueron clavados(*) no desmuñonados como era lo deseable, por falta de tiempo y de herramientas apropiadas para tal fin. Algunos cañones fueron enterrados secretamente, con la esperanza de poderlos recuperar en el futuro. Además de la tropa y marinería(2000), procedieron a embarcar unos 2000 civiles(en su mayoría españoles)(***)que habían manifestado expresamente su deseo de abandonar la plaza, para correr la misma suerte de los soldados. No se mostraban dispuestos de correr el riesgo siempre latente de ser sacrificados por los "chucutos".
La escuadra realista se reorganizó con dos flotillas, ahora bajo el mando superior de un veterano marino, el capitán de fragata don Fernando Lizarra, que a partir de ese momento desempeñaría el papel de "comodoro". La flotilla de Echeverría,( que hasta ahora había sido el comandante del apostadero), fué incorporada a la anterior para establecer entre ambas una especie de comando unificado, garantizando así el principio de unidad de mando. Zarpó la escuadra con mucho órden y parsimonia(a pesar del esporádico fuego de fusilería que con poca eficacia ya le estaban hacíendo los patriotas) desde la madrugada.
Esta formación naval estaba integrada por treinta buques de los cuales al menos doce eran catalogados como verdaderos buques de guerra. El convoy navegó sin recibir una oposición seria. Las pocas embarcaciones insurgentes (flecheras en su mayoría) en las cercanías de Angostura se vieron obligadas a retirarse, frente a la compacta formación naval, el aumentado poder de fuego y la superioridad operativa de los buques que tenían en frente.
Enterados de la evacuación realista,los sitiadores procedieron a romper un sector de la estacada y ocupar la plaza de inmediato. La ocupación completa fue dirigida por los generales Bermúdez y Cedeño, cuyas primeras medidas fueron, evitar excesos innecesarios, implantar el órden civil y proveer hasta donde fuera posible, comida y otros auxilios a los desgraciados pobladores que no habían podido o querido embarcarse.
Se publicaron bandos de ley marcial,conminando a la población a evitar el caos, a respetar la propiedad ajena, amenazando con disparar sobre los eventuales saqueadores, de ser necesario.

La narración por la parte española dice que “el enemigo se lanzó a la plaza y desde allí avanzando hacia la bahía, rompió sobre nosotros nutrido fuego de fusilería. Nuestros disparos de metralla lo contuvieron un tanto”.
Muchos equipajes quedaron abandonados en la orilla de los embarcaderos, para caer prontamente en poder de los saqueadores desmandados,que surgieron de repente sin temer a las represalias ya anunciadas de ser castigados severamente por las fuerzas de ocupación.

Llegada de los emigrados a Guayana.
Al llegar a Guayana, (el 19 de julio) los emigrados civiles pudieron desembarcar, y aprovechar para tomarse un descanso muy necesario. El día siguiente desembarcó toda la tropa-menos los enfermos- Claro que las condiciones allí en los castillos eran también muy penosas, de hecho ahora mucho peores debido al ingreso forzoso de un gran contingente en un área confinada, estrecha, miserable e incómoda aún en situaciones normales.
Los civiles al pasar los días comenzaron a protestar y exigir comodidades. Hasta en los mismos militares pudo observar el brigadier La Torre ciertas manifestaciones de descontento, asunto que a sus ojos expertos constituían una evidente señal de peligro. Todavía conservaba vagas esperanzas de recibir los socorros del general Morillo, pero quince días de permanencia en los castillos fueron suficientes para convencerlo que la ayuda no podría llegarle de ningún modo.
El pasado 7 de junio había despachado La Torre para que viajaran a Apure a un capellán, el padre Máximo acompañado del capitán Escalona, con instruciones de informar al general Morillo de las dificultades que estaban enfrentando en Angostura. Nunca llegaron (lo dice el cronista Sevilla) a saber si esta comisión se había cumplido correctamente.Tampoco llegaron a saber el destino de una importante suma de dinero que habían entregado al padre Máximo para incorporarlo a la tesorería del ejército, operando en el centro del país.
Mientras tanto se procedía a ordenar la construcción de montajes rústicos (cureñas) para colocar sobre ellos los cañones tomados de los castillos y poder aumentar así la capacidad artillera de los buques.

Hora de decisiones.
La presión de los patriotas era cada día mayor e insoportable, mucha tropa estaba siendo ahora enviada desde Angostura para reforzar en Guayana a las fuerzas sitiadoras, además Bolívar tenía un número considerable de soldados muy cerca de ahí, en su nueva base de Casacoima y que desde allí hostigaban regularmente y por cualquier medio a la plaza sitiada. Por esa misma circunstancia, los realistas sentían terror de ser rodeados de un momento a otro por una ”maniobra de asalto” de los insurgentes, combinada con medios navales y terrestres simultáneamente.
Para los realistas, las fortalezas se estaban convertiendo minuto a minuto en una peligrosa trampa a punto de cerrarse sobre ellos. Algo habría que hacer para enfrentar este inminente peligro. La decisión no era difícil de tomar, no había mas alternativa que abrirse paso a la brava,antes de que fuera demasiado tarde. La escuadrilla española era relativamente poderosa, bien mandada y perfectamente tripulada. Sabían que les esperaba la escuadra de Brión (**) aguas abajo, y esa escuadra era muy superior aparentemente y se mostraba muy agresiva . Por eso tratarían de hacerle frente a su amenaza aplicando toda la experiencia acumulada en ese tipo de guerra. Existían riesgos inmensos por la desproporción de poder naval, pero eran riesgos calculados y los iban a afrontar con fuerza y voluntad. En su favor existía el hecho de que el río Orinoco estaba crecido en toda plenitud, y por lo tanto navegar a favor de la corriente les concedía una excelente ventaja.

(*)Clavar los cañones era una manera rápida de inutilizarlos para evitar que fueran usados por el enemigo. Consistía en introducir a martillazos un clavo por el orificio ,ojo caliente o chumacera donde se colocaba la mecha. Desclavar los cañones era una tarea bastante difícil y trabajosa. Desmuñonar significaba cortar los dos muñones que servían para sujetar los cañones a las cureñas. Sin dichos muñones,las armas quedaban inutilizadas permanentemente.

(**) La escuadra de Brión al penetrar en el Orinoco en 1817, llevaba como segundo jefe, al capitán de fragata neogranadino José Padilla, el futuro héroe de la batalla naval de Maracaibo y que como Piar murió ejecutado en Bogotá (1828) por presuntamente haber conspirado contra el Libertador.

(***)En lugar de llamarlos "españoles", mas acertado habría sido llamarlos "realistas". En ese tiempo no se acostumbraba mucho a diferenciar a la gente por su nacionalidad de orígen, en principio todos eran españoles (de allá o de acá). La diferenciación existía mas bien referida a las clases, o se era blanco o se era pardo. Los españoles(recién llegados de España) se veían en Angostura y en muchas partes casi como gente de costumbres extrañas,(como vemos hoy a los "sifrinos turistas", ya sean americanos, franceses, ingleses o escandinavos),se les tildaba de exóticos,indiferentes,vacíos, disipados y blasfemos, pero en el fondo, tipos simpáticos e inofensivos. A diferencia del estereotipo aplicado a los llamados "mantuanos" criollos (o indianos como les decían en Europa) que si eran de verdad gente de fingida importancia y de pretendida autoridad, terratenientes, hacendados ricos,comerciantes exitosos,dueños de esclavos,"grandes cacaos" y a veces hasta sujetos fanáticos, conservadores, pichirres y rezanderos. Eran personas por lo común afectadas y pretenciosas, a veces pesadamente intolerables. No se calificaban entre ellos mismos de mantuanos, ese era un término peyorativo que les atribuía el pueblo llano. Se creían más españoles que el mismo Fernando VII y formaban dentro de las comunidades una casta impenetrable y distante. Por cierto que a la hora de las "chiquitas", eran los primeros que pugnaban por salvarse. A esos criollos pudientes y de estirpe se les llamaba "mantuanos" porque sus esposas asistían a todas partes cubiertas con un mantón de Filipinas (de Manila),prenda muy fina y costosa, que pretendía ser una señal de riqueza y poder. Había inclusive una ley colonial que prohibía utilizar esos atributos, a mujeres que no fueran de dicha clase.

lunes, 26 de abril de 2010

ARMADA 91













La Escuadrilla Sutil en el Orinoco. La vanguardia de Brión.

El capitán de navío Antonio Diaz, que al frente de su Escuadrilla Sutil operaba en las aguas de Barcelona (bocas del Neverí), se dirigió a Margarita un poco después que el Libertador decidiera transladarse a Guayana( 25 de marzo de 1817).
Allí en Margarita se presentó a su jefe inmediato,el Almirante Brión quien le ordena avanzar como vanguardia de la escuadra para allanar así su penetración en el Orinoco.
Tres flecheras constituían la punta de esa vanguardia al mando del alférez de fragata Fernando Díaz (hermano de Antonio). Recibe éste instrucciones de penetrar por el caño Macareo, para efectuar un reconocimiento justo hasta el sitio donde el caño se une con el Orinoco y luego regresar a unirse al grueso de la escuadrilla que navegaba detrás.

Emboscada del Caño Macareo.
Este pequeño destacamento, una vez alcanzado el Orinoco el 7 de julio de 1817, fué emboscado por una patrulla de combate (11 lanchas cañoneras) perteneciente a las Fuerzas Sutiles del Apostadero de la Antigua Guayana. Estas fuerzas estaban al mando del Capitán de Fragata Antonio Pascual de Ambaredes. Los patriotas combatieron heroicamente pero debido a la superioridad numérica del enemigo fueron finalmente derrotados y pasados todos a cuchillo (*), incluyendo entre ellos el alférez Fernando Díaz.
Unos pocos pudieron escaparse de la emboscada huyendo corriente abajo en un pequeño esquife (**) hasta que se encontraron con el grueso de la vanguardia mandada por Antonio Diaz a quien informaron de la terrible derrota sufrida, y de la muerte de su propio hermano.

Combate naval de Pagayos.
Lleno de furia y dolor, Diaz, sin consultar al Almirante ordenó a sus flecheras forzar las velas y avanzar sobre el ahora arrogante enemigo al que lograron interceptar cerca de la pequeña isla de Pagayos (8 de julio de 1817). Allí los marinos patriotas , luchando como fieras pese a su inferioridad numérica, poseídos de un arranque de temeridad suicida que tomó por sorpresa a los confiados españoles, desorganizaron su escuadrilla , degollando sin piedad y lanzando al agua a todos aquellos que caían en sus manos, abordando , incendiando, cañoneando , hundiendo y destrozando todo a su paso. Lograron recobrar tres flecheras de las que les habían sido arrebatadas anteriormente, y que los enemigos llevaban de remolque como trofeo de guerra.. Su ataque causó tanto daño y súbito terror que los sobrevivientes realistas no tuvieron mas remedio que huir despavoridos a refugiarse bajo la artillería de las cercanas fortalezas.

Honores a la Escuadrilla Sutil.
El 9 de julio de 1817, la escuadra de la República comienza su penetración al Orinoco por las bocas del Macareo. Sobre este estupendo espectáculo habla el insigne autor venezolano de la Historia Naval,el teniente Francisco Alejandro Vargas en su página 350 del tomo I de "Nuestros Próceres Navales" un bello trozo de su inspiración literaria, que leímos con orgullo en nuestros tiempos de cadetes: "Al día siguiente, cuando la aurora tiñe de reluciente carmín las nubes del horizonte oriental y enrojece las amarillentas aguas del Orinoco, divísanse entrando por la gran boca, como bandadas de blancos cisnes, numerosas velas que, turgentes, arrastran diversas naves de alto bordo. La bandera de la República tremola sobre los topes. Es la escuadra de Brión!.Salve, salve mil veces a los que vienen a redimir la Patria del opresor dogal de la colonia! Majestuosa procesión la de esos buques, tripulados de héroes y cargados de elementos para la guerra, surcando las aguas del majestuoso río que en breve tiempo será la linea divisoria entre republicanos y realistas y para estos últimos para siempre inabordable".

Al ser informado Brión de la hazaña lograda por la Escuadrilla Sutil el día anterior, dispone ejecutivamente que todos sus buques se estacionen al pairo en espera de la gloriosa escuadrilla. Al abordar Díaz la nave insignia del Almirante, todos los buques deben disparar un cañonazo de honor al tiempo que efectúen el tradicional saludo marino de arriar e izar enérgicamente el pabellón nacional.

La escuadrilla de Díaz había sufrido muchas averías en ese combate por lo que se ordenó enviarla a Margarita para someterla a reparaciones. Diaz entretanto se dirigió con algunas pocas embarcaciones de las no dañadas a Maturin entrando al río Guarapiche por vía del caño San Juan.

Encuentro de Piar con el capitán de navío Antonio Díaz
Díaz se encontraba destacado en Maturin en el mes de agosto (1817), cuando tuvo lugar su entrevista con el general Piar (alojado entonces en la residencia del general Andrés Rojas) que había arribado a esa plaza después de retirarse de Guayana- desobedeciendo el llamado del Libertador - y según testimonios, se atrevió esta vez a hacer proposiciones abiertamente sediciosas al oficial de marina, quien simplemente había acudido a su presencia con otros jefes y oficiales de la guarnición para presentarle sus formales respetos,como le obligaban la disciplina y el protocolo militar.
Los términos equívocos y resentidos con que el general Piar llegó se manifestó frente a Antonio Díaz fueron motivos suficientes para que mas adelante éste oficial fuera citado como testigo ante el Consejo de Guerra, que en Angostura se encargaba de procesar al héroe de San Félix(***) De los testimonios presentados se deduce que el general Piar intentó sibilinamente despertar sentimientos racistas en el mulato Díaz para engancharlo(con promesas)en una conspiración apuntada contra los criollos mantuanos del ejército- Bolívar el primero entre ellos-en lo que Díaz, correcto y leal, se negó rotundamente a tomar compromiso. Su testimonio ante el tribunal fué un elemento decisivo a la hora de dictarse una sentencia condenatoria(****).

Navegabilidad en el rio Orinoco.
La época entre julio y agosto es la más conveniente para navegar en el río Orinoco. Son los meses de las grandes crecidas, el nivel del agua llega a subir considerablemente y los peligros constantes de encallamiento que se presentan en los meses de verano, prácticamente dejan de ser una preocupación mayor para los marinos que trafican en sus corrientes. Existen sí en invierno, los peligros de las acumulaciones (bancos)de arena y sedimentos que son normalmente impredecibles y la posibilidad de chocar con grandes masas rocosas que a veces afloran en el curso de la vía fluvial y que por la subida de las aguas quedan sumergidas y ocultas, por lo cual son sumamente traicioneras.También son de cuidado los "carameros" o "mosuros" esta última una palabra indígena(como lo son por ejemplo "warimba"y "repano". Mosuro se traduce en español castizo como "mogote feo". Estos mogotes están formados por plantas acuáticas, trenzadas con bejucos, ramas de árboles, espineros y maderos punzantes que forman una mescolanza grotesca flotando a la deriva en busca de mejores horizontes. Peligrosos son porque al chocar con ellos se podría abollar y hasta perforar el casco de un buque o dañarse gravemente la hélice si se tratara de una nave de motor. Se les suele comparar con los "icebergs" que hundieron el Titanic porque solamente un décimo de su volúmen está a la vista mientras que los otros nueve décimos son un infierno fluvial debajo del agua, con remolinos, pirañas y todo. Otro peligro de los "mosuros" es que a su bordo navegan generalmente pelotones de culebras de las bravas, dispuestas a defender su paraiso flotante a mordizco limpio.
Sin embargo, el comportamiento de las masas cambiantes y la posición fija de las rocas, son perfectamente reconocidas por los prácticos del río, quienes hán constituído desde hace mucho tiempo yá,un gremio orgulloso muy eficaz para garantizar la seguridad de la navegación a todo lo largo y ancho del mismo, incluso con buques de regular calado que aún en épocas pretéritas podían adentrarse sin problemas hasta la altura de Borbón (Almacén) o de Moitaco,y en tiempo de invierno hasta los puertos de Caicara,Cabruta y mucho mas adentro remontando los ríos Apure, Portuguesa, Arauca, Guárico y el Meta. Los pilotos de río o "prácticos" como se les conoce se forman desde su temprana juventud acompañando a pilotos experimentados en determinado sector del río que deben aprender a conocer con mucha precisión. La de ellos es una labor especializada, sectorizada y permanente. Esperan a los buques en un paraje fijo a la entrada del río, los abordan y a partir de ahí son los guías del capitán para ayudarlo a transitar una determinada ruta sin peligro. En el caso del Orinoco -antiguamente - las estaciones de pilotaje se situaban en la desembocadura al mar de los caños, Mánamo, Macareo o Boca Grande, desde donde conducían las naves hasta su destino aguas arriba, generalmente hasta Angostura. De la capital de la provincia hacia arriba habían (y los hay todavía) otros pilotos expertos en la vía fluvial. Para el descenso hacia el mar, se debía aplicar la misma tónica e iguales procedimientos. Lo más dificil de todo era el llamado "pasaje de la barra" donde debían sortear las caprichosas acumulaciones de arena que a veces bloqueban la entrada. Con la canalización y señalización moderna de la vía fluvial desde Boca Grande (Punta Barima) hacia arriba y viceversa, la navegación se há hecho mas expedita,sin embargo la utilización de prácticos todavía es obligatoria. porque con canal y todo, a veces el Orinoco se muestra impredecible con los forasteros.
En los años de la guerra de la Independencia ya existía una adecuada cartografía para transitar esas aguas, que se debía sin duda a la sistemática observación y registro por parte de las autoridades españolas que habían reconocido tener en el río Orinoco una importantísima arteria de penetración hacia el pie de monte andino de la Capitanía General y profundamente hacia los llanos de Casanare en el Nuevo Reino de Granada.
De hecho se sostiene que las actividades de navegación en esos tiempos eran mucho más dinámicas, frecuentes y activas, que las que llegaron a conocerse en el resto del siglo XIX y la primera cuarta parte del siglo XX.
No hay que llamarse a engaño, remontar el Orinoco en buques de vela (*****) era una tarea demasiado exigente, y sigue siéndo exigente hoy día aún con buques propulsados a motor.

Alarma en el campo realista.
El sorpresivo triunfo de los patriotas en Pagayos el 8 de julio, causó gran alarma(el día 15) entre los defensores de Angostura y entre los sitiados en los Castillos de Guayana. Yá tenían conocimiento pleno de la entrada de Brión con su escuadra y su emplazamiento en la ensenada de Casacoima. Allí permanecía estacionada y protegida por la artillería del recién construído fortín de Punta Cabrián, en cuyas cercanías había Bolívar establecido precisamente su Cuartel General.Después que Piar regresó a Angostura a mantener el sitio de la plaza, Bolívar en persona asumió el hostigamiento sobre las fortalezas, preparando su control total una vez que llegara la escuadra de Brión. Las misiones del Caroní demostraron ser una fuente interminable de recursos, totalmente a la disposición de El Libertador. Víveres de todo tipo, ganado en pié, cueros para monturas,madera para embarcaciones, caballos para la guerra, reclutas indígenas para el ejército, mulas para exportación a las colonias inglesas, y oro..bastante oro que compraría armas y equipos para continuar la guerra. Lo que seguramente molestó mucho al general Piar y lo convirtió finalmente en reo de delitos militares, fué el hecho de que Bolívar llegara de improviso y se "apoderara" de todo ese emporio de riquezas que él (Piar) había conquistado de primero.
Otro motivo de disgusto para Piar fué la ejecución sorpresiva de más de una veintena de misioneros capuchinos, quienes se habían entregado como prisioneros a sus fuerzas y confiaban con la protección ofrecida por aquel. La muerte ignominiosa de estos religiosos se mantiene en un velo de misterio, se habla de que hubo una mala interpretación de órdenes.Pero eso no há convencido a nadie hasta el día de hoy.
La verdad es que los padres fueron malamente asesinados, mandados a matar precisamente con los mismos indios "misionados" a quienes ellos habían estado civilizando y protegiendo como pupilos por mas de medio siglo.
Quienes permitieron el asesinato de los curas -o pudieron evitarlo- fueron las recién llegadas fuerzas de Bolívar, nó precisamente las de Piar, que yá se habían marchado hacia Angostura y carecían por lo tanto de jurisdicción.
Piar, muy sentido e impresionado por esta barbaridad,llegó imprudentemente a comentar delante del Padre (Coronel) José Felix Blanco (administrador de las misiones nombrado por Bolívar)su disgusto por lo que él consideraba un crimen injustificable y atroz.
Al "chisme" de murmuración contra el Jefe, se agregaban otros comentarios malsanos relacionados con una supuesta corrupción de Piar al haberse adueñado de unas mulas de las misiones y haberlas vendido para su provecho personal.
Pronto, a velocidad del rayo, los chismes llegaron a conocimiento del Jefe Supremo. Ahí comenzó para Manuel Piar el pricipio del fin.

(*) La expresión pasar a cuchillo era ampliamente utilizada en esos tiempos de la guerra a muerte. Era similar al término "degüello" que también se utilizaba. Toque a deguello era producido por un corneta, donde se ordenaba a no dejar ningun prisionero vivo. Consistía en cercenar rápidamente la yugular con un cuchillo muy afilado tal como se hace con los ovejos cuando se les sacrifica. Es una muerte rápida pero muy cruel, sobre todo porque se hace a sangre fría. Y algunos la consideraban mas económica por no implicar gasto de municiones escasas. La víctima se desangraba profusamente por el cuello y en cuestion de minutos ya estaba muerta. Los misioneros capuchinos de Caruachi, pidieron a gritos ser degollados para poder morir rápidamente, en lugar de servir de blancos de práctica a los indios flecheros que se divirtieron de lo lindo con los primeros religiosos ejecutados, que sufríeron mucho y tardaron demasiado tiempo en mal morir. Otro caso famoso:los 800 españoles y canarios ejecutados por Arismendi en las bóvedas de La Guaira- por órdenes del Libertador- fueron todos degollados a la orilla del río "Osorio" cuyas aguas corrían por el patio de las bóvedas , mientras que los vecinos pudieron observar por mas de seis días como el agua del mar donde desembocaba la quebrada estaba teñida toda de rojo.

(**)Esquife (del holandés Schip) es una pequeña embarcación auxiliar agregada a un buque mayor para servicios de transporte de buque a tierra y salvamento.

(***)Testimonio de Antonio Diaz: Piar solicitó confidencialmente que Diaz lo auxiliara con sus fuerzas para ejecutar bajo su mando una operación militar de sorpresa contra la plaza de Güiria (en poder de los patriotas). Diaz respondió no tener fuerzas disponibles por estar sus buques reparándose en Margarita. Piar se sinceró entonces y le manifestó su plan para establecer en la provincia de Guayana un gobierno que desconociera las facultades del Jefe Supremo,ya que éste y sus colaboradores "mantuanos" habían pretendido sacrificarlo , por lo que había tenido que huir para salvarse. Tenía la intención de reunir en Cumaná un ejército propio para regresar a Guayana y apoderarse del mando.Si sus planes triunfaban, Piar alimentaba el propósito de eliminar a todos los mantuanos antes que éstos destruyeran a todos los hombres de color, como eran él y Díaz.Intentando halagarlo,le ofreció convertirlo en Almirante de la República y al efecto así comenzó a llamarlo a partir de ese momento. El capitán Diaz fué tajante, protestó airado las intenciones del general Piar de involucrarlo en esta maniobra y le confirmó su decisión de cumplir las órdenes del gobierno establecido. Al retirarse Díaz de la reunión,Piar le insistió seriamente que no debía ir a Guayana, porque al llegar sería sacrificado por la gente de Bolívar.

Nota: A diferencia de Miranda, el general Piar antes, y en en los comienzos de la guerra de independencia había sido oficial de marina. En 1811 en Puerto Cabello fué reconocido como alférez de fragata. Llegó inclusive a comandar un jabeque,el "Piar" dentro de la escuadrilla enviada por Mariño a sostener el bloqueo contra Puerto Cabello y con él participó activamente en el combate naval de Sorondo en el rio Orinoco(1812).En el combate de Chuspa contra los bergantines "Celoso" y "Alerta" estuvo al mando del "Arrogante Guayanés". Mas tarde en compañía de Mariño y de un nutrido grupo de oficiales patriotas,desembarcó en Venezuela procedente del islote trinitario de Chacachacare(donde se habían refugiado para huir de las persecuciones de Cervériz) y fué desde allí (en Güiria) incorporado como coronel en las fuerzas insurgentes que se formaron en oriente para combatir contra la restauración del dominio español por Domingo de Monteverde. Ver: Acta de Chacachacare.

(****) La sentencia de Piar: "Vista la sentencia pronunciada por el Consejo de Guerra de oficiales generales contra el general Manuel Piar, por los enormes crímenes de insubordinado, desertor, sedicioso y conspirador, he venido en confrimarla sin degradación. Pásese al señor Fiscal para que la haga ejecutar, conforme a ordenanza, a las cinco de la tarde del dia de mañana.- Bolívar. Cuartel General de Angostura, 15 de octubre de 1817".
"En la plaza de Angostura....yo, el infrascrito Secretario, doy fé que en virtud de la sentencia de ser pasado por las armas, dada por el Consejo de Guerra, su excelencia el general Manuel Piar.......puesto el reo de rodillas delante de la bandera y leídosele por mi la sentencia en alta voz, se pasó por las armas a dicho señor general Manuel Piar, en cumplimento de ella, a las cinco de la tarde del referido día........y llevaron luego a enterrar al cementerio de esta ciudad donde queda enterrado;y para que conste por diligencia lo firmó dicho señor (Juez Fiscal) con el presente Secretario_ Carlos Soublette _ Ante mí, J.Ignacio Pulido, Secretario".
Nota: Se dice que ejecutando a Piar,Bolívar extirpó una punta del triángulo malévolo que le había venido planteando una permanente querella. Las otras dos puntas (Mariño y Bermúdez)esta vez cogieron escarmiento, aprendieron la lección y formaron desde entonces una especie de figura plana sin puntas visibles. Una cosa es casi segura, si Bolívar no hubiera fusilado a Piar, Piar habría fusilado a Bolívar cuando lo tuviera a mano. Ambos desde el comienzo se tenían muchas ganas.
El cuerpo del general Piar. En el documento donde se señala la ejecución (ver ****), apenas se hace una mención casi marginal de que fué enterrado en el cementerio de la ciudad sin mayores detalles. Sepultar a álguien apresuradamente, en la obscuridad de la noche, sin el debido protocolo civil y eclesiástico y sin producir algún documento o acta que permitiera determinar los pormenores del enterramiento, parecería estar ocultando algún propósito malicioso. No era cuestión de inhumar un cadáver como si se tratara de un "perro muerto" o de algún indigente víctima de la peste bubónica. En esos tiempos,la iglesia era esencialmete exigente en el cumplimiento de las normas cristianas, sobre todo cuando se trataba de una personalidad muy notable, nada menos que del general en jefe Manuel Piar, un militar muy reconocido y reputado hasta ahora como el conquistador de la provincia de Guayana. ¿Porqué tanto misterio? . Que necesidad había para ocultar con un velo de telarañas algo que se había efectuado dentro de las normas legales y en presencia de muchos testigos?
La explicación parece sencilla: Evitar que su tumba se llegara a convertir en un lugar de romería anti-bolivariana, un ícono sagrado, un símbolo para todos aquellos que tenían a Piar como su guía indiscutible, aún frente a los designios ignotos del Libertador Bolívar. Se trataba de evitar el surgimiento de un mártir de la resistencia, ocultando celosamente del conocimiento público,el lugar preciso del enterramiento. Sin embargo, eso de "haberlo enterrado en el cementerio de la ciudad" no convence a nadie. ¡ Quien lo presenció? ¡Quienes integraron el equipo encargado de transportar el cuerpo y ver cuando lo enterraban? Se habla de que unos "negros esclavos" fueron los que hicieron el trabajo, sin catafalco,transladado en una hamaca y envuelto solamente en un pedazo de lona marinera, sin marcas y sin nada. Lanzaron el paquete ensangrentado, taparon el hoyo apresuradamente y se fueron sin dejar marcas. Es un cuento inverosímil. Acaso existía un miedo tan grande hacia la Autoridad Suprema, que no permitiera siquiera conceder al yá inofensivo cadáver de Piar una decente sepultura? ¿ Porque tanto odio a un muerto? ¿Y sus familiares que vivían con él en Guayana? Soublette por ejemplo era pariente consanguíneo de Piar, primo hermano. ¿ Y sus compañeros de armas? ¿Y el obispo de Guayana?(El obispado estaba ahora acéfalo porque el Obispo don José Ventura Cabello se acababa de embarcar con La Torre), pero en su defecto que papel jugó el párroco metropolitano ?) ¿A que temían todos ellos? ¿A la ira del Jefe Supremo? Son misterios que no aclara la historia, pero que se debían aclarar ahora.
Con todos sus delitos, Piar nunca dejó de ser un prócer de la República. Un procer heroico por mejor decir, más heroico que muchos si a ver vamos, uno de los generales en jefe contemporáneos de Bolívar.
Una hipótesis válida.Han surgido en tiempos recientes, sobre todo en Guayana, grupos que simpatizan con la idea de encontrar los restos mortales del héroe Piar para rehabilitarlo ante la historia nacional. Pero la ubicación de esos restos si acaso existen todavía, es una tarea extremadamente difícil. aunque nó imposible. Existe la hipótesis,de que el cuerpo de Piar recién muerto, fué introducido en la Catedral de Angostura,(en cuya pared occidental había sido ejecutado minutos antes). Los religiosos -por iniciativa superior-y muy reservadamente procedieron a suministrar a eos restos mortales el debido tratamiento cristiano,con permiso condicional de las autoridades, pero en ceremonia interna y privada. Luego,procedieron a sepultarlo en la misma iglesia(como se acostumbraba a hacer con personas de cierto rango en la sociedad). Al registrar (obligatoriamente) su inhumación en los libros de la parroquia, optaron por hacerlo con nombre figurado (por exigencias del gobierno),para ocultar convenientemente la "verdad verdadera" y cumplir el interés oficial en su desaparición.
Hasta donde se sabe, ninguna institución há iniciado hasta ahora, un esfuerzo serio por encontrar los restos del general Piar. Si resurgiera el interés de hacerlo,a través de una comisión bien calificada,con apoyo decidido del gobierno y con el concurso especializado de las instituciones histórico-académicas del país, una investigación en los libros de defunciones existentes en la catedral de Ciudad Bolívar (Angostura)en los días cercanos al suceso histórico podrían (hipotéticamente) llevar a descubrir inhumaciones anotadas con nombres ficticios. Una exhumación legal y una inspección forense cuidadosa podría llevar a descubrir cuales son y donde están los restos mortales del infortunado prócer. Si otros lo han merecido, también Piar debería acceder al Panteón Nacional.

(*****)La navegación a vela por el Orinoco.En algún capítulo mas adelante haremos comentarios detallados sobre este tema. Es importante tener una idea sobre este tipo de operaciones,considerando que se debe a veces remontar el río enfrentando corrientes de agua muy poderosas que corren en sentido contrario, arrastrándolo todo con violencia. Lo que aguas-bajando pudiera constituir una gran ventaja para las embarcaciones, aguas-subiendo las corrientes presentan un problema enorme,en especial cuando solamente se dispone de la fuerza del viento actuando sobre las velas. A simple vista, parecería una tarea bastante difícil (que lo es), pero há sido posible hacerlo eficazmente desde tiempos remotos, todo gracias a que se saben aprovechar los vientos predominantes(los alisios) que soplan casi todo el año en dirección este-oeste, en cambio que la corriente del río fluye de oeste a este. El descubridor Diego de Ordaz fué el primer explorador europeo que remontó el Orinoco desde su desembocadura hasta los raudales de Atures y Maipures entre los años de 1531 y 1532, y lo hizo en embarcaciones de vela. Subiendo río arriba se utilizan los vientos como impulsores, y bajando se aprovechan inteligentemente las corrientes del río-abajo que suelen ser muy fuertes y constantes. A lo largo de los siglos XVIII, XIX y principios del XX, buques veleros de mediano tamaño pudieron navegar regularmente por el río Orinoco hasta Angostura y mas adentro. Llegaron inclusive a existir líneas navieras que desde sus bases de operaciones instaladas en la inglesa isla de Trinidad permitían mantener una confiable comunicación de Angostura/Ciudad Bolívar con el resto del mundo. En el libro de los hermanos Constantino y Paul Georgescu,"Los Ríos de la Integración Suramericana", página 58, señalan que en un período muy corto (27 de junio al 18 de julio de 1818) entraron al puerto de Angostura,el bergantin americano "Elena",el bergantín francés "Ana",el bergantín inglés "Sarah",la goleta danesa "Josefina", y la goleta nacional "María".
Salieron con destino a las colonias caribeñas, las goletas: "Halifax Packet", "Libertad", "Amistad","Georges Butter", "Los dos Amigos","Harlequin", "María", "Pax" y el bergantín francés "Ana". Todos ellos propulsados a vela. Mas adelante afirman que :"desde el 22 de agosto de 1818 hasta el 27 de marzo de 1819, en siete meses, las entradas y salidas de buques de varias nacionalidades suman 204". Dicen los Georgescu (pag 59)"desde Angostura salió el primer buque de bandera venezolana que entró el el puerto de Nueva York. Fué la Goleta "Barinesa" salida el 15 de mayo de 1818. En ese mismo año de 1818 navegó sobre el Orinoco el primer barco de vapor, que venía desde Trinidad y llevaba a bordo al Gobernador de la mencionada isla" (Sir Ralph Woodford James)

jueves, 22 de abril de 2010

ARMADA 90



Campaña de Brion en el Orinoco..
Las promesas del Almirante para Bolívar eran halagüeñas. Aquella carta-informe del 5 de junio está llena de patriótico optimismo y contribuye a levantar por fin los ánimos decaídos del Libertador y sus inmediatos colaboradores.
El año de 1817 había sido hasta ahora un período muy dinámico dentro de la historia republicana,lleno de sucesos favorables y desfavorables. Perdida casi toda la región norte-oriental, en especial las importantes plazas de Barcelona y de Cumaná, y estando el bastión margariteño gravemente amenazado, no quedaba más alternativa que desplazar todo el esfuerzo de la guerra hacia la provincia de Guayana, donde los resultados prometían ser mas afortunados,considerando que en esa provincia,los realistas estaban enfrentados a una notable desventaja estratégica. Sus dos importantes guarniciones, Angostura y Guayana la Vieja permanecían sitiadas por el lado de tierra,existiendo para ellos muy escasas probabilidades de recuperar lo que habían perdido recientemente en San Félix.
Todavía los realistas-con la presencia activa de su marina- habían podido conservar el dominio del Orinoco. A lo largo del río lograban todavía mantener las comunicaciónes abiertas(aunque dificultosas)con el mando superior del general Morillo,aquel quien en lugar de asumir personalmente las responsabilidades de la recaptura de Guayana como hubiera sido lo más lógico, había preferido desde San Fernando de Apure (el 9 de febrero de 1817) destacar a su segundo, el brigadier Miguel de La Torre para que tomara el mando de las tropas. Creyendo equivocadamente que sería una tarea fácil y secundaria, ordenó a éste que viajara a Angostura para desalojar a Piar de la provincia y recuperar el control de Guayana, mientras que él fijaría sus atenciones hacia el centro de la Capitanía General como un objetivo principal. Después de dominado el centro, podría ocuparse de los problemas de oriente, en Barcelona,en Cumaná, en Carúpano y muy especialmente en el incorregible bastión de Margarita,adonde quería el Pacificador transportar sus ansias profundas de desquite y venganza por los engaños de Arismendi en el año 15.
Este argumento es solo una opinión,una conjetura posiblemente sesgada,aunque muy factible. A la isla heroica,aparentemente Morillo se la tenía jurada y parecía que ahora estaba llegando el momento de la verdad.
No existen evidencias de que la decisión de Morillo hubiese sido inspirada en un inaguantable deseo de venganza. En sus escritos posteriores el general lo niega con firmeza,al referirse a su primera invasión de 1815 manifiesta que “muchos jefes de la Revolución …todos fueron respetados y hasta el mismo Arismendi que un año antes había sido el instrumento de correr la sangre de 800 españoles del modo mas inhumano..”. (Hacía mención a aquellas ejecuciones masivas que por órdenes precisas del Libertador se llevaron a cabo en las bóvedas de La Guaira en 1813) . En sus mismos escritos sostiene que ni su presencia (en Margarita en 1817) ni sus deseos "eran los de un hombre que que iba a tomar venganza de la sangre de sus inocentes compañeros de armas indignamente sacrificados en aquel ingrato suelo por el primero de todos los hombres ingratos". El notable escritor Jesús Manuel Subero en su "Historia del Estado Nueva Esparta”(pag 87)opina que... "Morillo estaba convencido de la importancia estratégica de Margarita,de su valor, de su fé en la libertad,de que la rebelión sepultada en otros predios, renacía en Margarita. De que Margarita es el centro de la rebeldía. Por eso viene a la isla."...


Angostura y los Castillos de Guayana..
Para Bolívar era muy importante rendir las plazas de Angostura y Guayana la Vieja. Tomarlas a través de un ataque frontal por el lado de tierra iba a resultar muy difícil según las apreciaciones de el Libertador. En Angostura por el sector norte habían levantado los españoles el fortín de San Rafael( * ) que dominaba las aproximaciones por el río y la Alameda, por el lado sur (los Morichales) habían construído el reducto de San Fernando comunicado con un masivo parapeto de tierra apisonada (calicanto) dotado de alojamientos amplios para los cañones y de múltiples bastiones aspillerados para los fusileros que a lo largo de unas 800 varas castellanas defendían el sector.
En Guayana la Vieja situada más abajo-donde comienza el delta-( a orillas de la laguna de Casacoima )los realistas controlaban los llamados "Castillos de Guayana” conformados por las antiguas fortificaciones de San Francisco de Asis y de San Diego de Alcalá(Padrastro)( ** ),reforzados con multiples emplazamientos para la artillería, y que podían comunicarse entre ellos por medio de trincheras y caminos cubiertos.
En apoyo directo de ambos dispositivos se encontraba instalada una cortina defensiva de buques de guerra de diversos tipos, un total de 16 embarcaciones que incluían corbetas, bergantines , goletas, polacras , balandras, cañoneras ,flecheras y buques de transporte que sumaban entre ellas un potencial artillero de más de 100 cañones de diverso calibre y una abundante y bien adiestrada tripulación de marineros y guarnición embarcada.
Conociendo la pronta llegada de la escuadra de Brión al río Orinoco, Bolívar creyó necesario levantar algunos astilleros de ribera en los desembarcaderos de San Miguel y Puerto Tablas(San Félix) donde Arismendi y sus huestes margariteñas procedían aceleradamente a construir flecheras y otras embarcaciones menores.(La gente de Margarita siempre dominó el difícil arte de la construcción naval de mediana escala).
Igualmente dictó Bolívar sus órdenes para que los oficiales del recién fundado Cuerpo de Zapadores(ingeniería militar ),el capitan Passoni, y los tenientes Ottavi y Bartolozzi, dirigieran la construcción de una fuerte estacada en la ensenada de Punta Cabrián en cuyos emplazamientos se colocaron 6 cañones de sitio,y destacándose para custodiar el lugar una guarnición fija a las órdenes del coronel neo-granadino Francisco de Paula Santander. Los operarios albañiles que trabajaron en la construcción del fuerte“Brión”-como se le llamó mas tarde- fueron traídos de la Villa de Upata.

(*)San Rafael se llama un sector de la actual Ciudad Bolívar donde aún existen vestigios del antiguo fortín-

(**)Padrastro se llamaba a una fortificación que cubría con sus fuegos a otra fortificación cercana,para evitar que aquella fuera aproximada y abordada por los ángulos muertos. Generalmente las fortificaciones en pareja se cubrían mutuamente sus respectivos puntos críticos.

ARMADA 89
















Madariaga(izq) Bandera de 1817(arriba) Mariño (der)



Sobre el “Congresillo” (*) de Cariaco.
Originalmente, el Congreso procedió a designar a La Asunción como capital provisional de la República (ahora bautizada como los Estados Unidos de Venezuela).
A la isla de Margarita (con Coche y Cubagua,ahora llamada Estado Nueva Esparta por acuerdo del 12 de mayo de 1817) se trasladan los poderes ejecutivo y judicial cuyas sedes estarían ubicadas en la ciudad de Pampatar, en el llamado Palacio Federal (la Casa Amarilla).
En otro acuerdo, el Congreso decreta la Ley Marcial(**)al conocerse la firme intención del general Morillo de atacar la isla una vez más.
Se decreta también el uso de los pabellones de los buques de guerra (siete estrellas azules-las siete provincias-sobre la franja amarilla de la bandera),quedando el pabellón tricolor sin estrellas como insignia de los buques mercantes.
Finalmente se acuerda conceder privilegios al comercio de Inglaterra y de los Estados Unidos de América. Este fué un gesto unilateral de motu-propio, intentando con ello atraer la simpatía de aquellos dos países hacia Venezuela, como paso previo a un muy deseado reconocimiento diplomático.

Mudanza de la sede del Congreso a Maturin.
El 29 de mayo los promotores del Congreso, Francisco Antonio Zea, Francisco Javier Maiz y Madariaga deciden por razones de seguridad ante el inminente ataque español, transladar a Maturin la sede del gobierno federal.
En Margarita se deja ejerciendo el cargo de gobernador al general Francisco Esteban Gómez, con instrucciones precisas de preparar la defensa del Estado ante la invasión que se avecinaba.
La idea de un Congreso para designar nuevas autoridades, precisamente en momentos de crisis extrema no podía ser lo más recomendable.

La mano de Mariño tras bastidores.
Sugerido por el espíritu "atolondrado" (***) de Madariaga, aficionado como era a intrigar y subvertir casi por inclinación natural, el Congreso había sido convocado por el único que en el momento y en el lugar podía ejercer ese poder de convocatoria. Nada menos que el general Santiago Mariño,cuya rivalidad con Bolívar era ya notoria y evidente. Su beneplácito en este sentido no se podía negar. Soñaba con convertir al Libertador en un magistrado político puramente, arrebatándole de cuajo todo mando militar, que por supuesto deseaba conservar para él y para sus incondicionales,como Manuel Piar por ejemplo.
Este último al recibir la convocatoria de Mariño y al leer las copias de sus proclamas, no puso ninguna objección, aceptando con mucha alegría la implícita proposición de disminuír o anular la influencia del Jefe Supremo.
Fué aparentemente Piar uno de los pocos que tomó en serio el asunto del Congreso y se dió a la tarea de trabajar en su implementación. Envanecido por el triunfo en la batalla (de San Félix), sugestionado por algunos aduladores, creía fácilmente ahora- apoyándose en Mariño quien veladamente le incitaba- poder construír y conservar para sí mismo una supremacía en Guayana desplazando al Libertador, a quien no dejaba de considerar como un intruso.

Las rivalidades contra El Libertador.
Si algo tenían en común Piar, Mariño–y Bermúdez al principio- era la rivalidad obsesiva, morbosa y enfermiza contra el Libertador. La causade este sentimiento era sencillamente un reconocimiento a la calidad superior implícita en éste personaje, que solía producír resquemor, envidia y resentimiento en otros espíritus de nivel inferior.
Más adelante, no existiendo ya Piar en el mundo y sosegado a tiempo Mariño, las cosas pudieron manejarse sin mayores dificultades. Tiempo después,mas adelante y bajo circunstancias muy diferentes, surgiría como otro rival intransigente, de mucho arrastre político y fuerte personalidad, el neogranadino general Francisco de Paula Santander,(****) quien por cierto, a punto estuvo de correr la misma suerte que Piar.

(*)"Tan poca solidez llegó a poseer ese Congreso de Cariaco, que solo bastó la amenaza impuesta por la aproximación de Pablo Morillo para que se disolviera- dijo Bolívar-como casabe en caldo caliente” Por eso se le conoce con el remoquete peyorativo de "Congresillo de Cariaco”.

(**)La Ley Marcial concede predominio a las autoridades militares sobre las civiles,y se aplica solo en casos de emergencia.

(***)Madariaga había escapado de la prisión de Ceuta en el norte de Africa-

(****)El general Santander estuvo condenado a muerte en 1828,aunque fué a tiempo indultado, conmutándosele la pena de muerte por destierro.

miércoles, 21 de abril de 2010

ARMADA 88


Situación de la Escuadra Republicana en 1817.
El almirante Brión, había tomado muy en serio el encargo que en Barcelona le había hecho el Libertador para que procediera a sostener un bloqueo contra los puertos de Cumaná, Guayana La Vieja, La Guaira y Puerto Cabello, y también para darle forma y operatividad a la recién creada institución del Almirantazgo, cuya sede habíase establecido originalmente en Margarita ( puerto de Juan Griego). Desde el mes de enero de 1817 no se habían vuelto a encontrar Bolívar y Brión, ya sea porque el Libertador se mantenía alejado, en constante campaña contra las amenazas realistas que desde todas direcciones hostigaban a Barcelona o porque después había decidido marcharse al sur ( el 25 de marzo) a reunirse con Piar. Desde ese momento Brión no había intercambiado más correspondencia con el Jefe Supremo según él mismo lo manifiesta en su informe del 5 de junio de 1817 estando a bordo del bergantin "El Invencible”en el puerto de Carúpano.
La correspondencia está dirigida "al honorable ciudadano Simòn Bolívar, Presidente de los Estados Unidos (sic) de Venezuela - Guayana”.

Informe de Brión a Bolívar
En este documento, el Almirante le informa sobre los últimos acontecimientos que consideraba muy importantes de transmitir al Libertador. Le refiere a la presencia del Canónigo de Chile (José Cortés Madariaga) en Venezuela, quien dijo venir con encargo del gobierno inglés para informarse sobre la situación de los gobiernos independientes en América del Sur incluída Venezuela y examinar en base a sus informes al Parlamento (inglés), las posibilidades existentes de conceder a esas Repúblicas el debido reconocimiento diplomático. Le participa además de haber atendido a la convocatoria hecha por el Congreso(*)( el mismo que por instancias de Madariaga se había instalado en la población de Cariaco el 8 de mayo de 1817) y agrega haber creído su deber "como republicano celoso de nuestra santa causa, hacer proclamar el Gobierno Federal"
Dice además que el Canónigo partió para Jamaica en el " Cóndor" con los despachos, después de haber sido nombrado Ministro Plenipotenciario(sic) cerca del Gobierno de los Estados Unidos,para procurar fondos destinados a la causa independentista.
Nota: Lo manifestado por Brion en estos párrafos parecería estar adornado de una profunda ingenuidad política (tal vez sorprendido en su buena fé) . Primeramente, que se sepa el canónigo Madariaga, reconocido como un intrigante y agitador por excelencia; no representaba ninguna autoridad formal para andar por ahí sugiriendo la convocatoria de congresos y cambiando sistemas de gobierno. Menos aún cuando decía estar representando al gobierno de Inglaterra.

Centralismo frente a Federalismo.
El centralismo como sistema de administración política, había sido institucionalizado por Bolívar desde los tiempos de la Campaña Admirable. Es sabido que éste nunca quiso aceptar la reinstalación del federalismo de la Primera República por creer que era un sistema no aplicable en la práctica y hasta lesivo en cierta forma a la realidad política del país y a las necesidades del momento.
Además,legalmente Bolívar estaba todavía investido de la Autoridad Suprema y nadie lo había despojado de ese carácter, aún cuando temporalmente estuviera ausente. Este Congreso de Cariaco, ilegítimo, espúreo y oportunista,había pasado por sobre la autoridad del Jefe Supremo tomando iniciativas extrañas, sin participárselo siquiera al principal afectado que estaba ausente. Sin duda alguna que todo este “parapeto” era parte de una conspiración de individuos interesados en enturbiar la situación y desconocer al Libertador una vez más, por intermedio de un virtual golpe de estado.

Mas adelante escribe Brión: "Mariño no se contentó con quedar como estaba; ha formado un gobierno provincial y se há hecho nombrar Presidente, de modo que su empleo como general de los ejércitos cesa”.
Nota: resulta muy curiosa (aunque nó extraña)esta actitud de Mariño, tradicionalmente ansioso de adelantársele a Bolívar en todo lo que le fuera posible.
Precisamente, el Congreso de Cariaco había sido convocado por el mismo general Mariño, apoyándose posiblemente en las sesgadas recomendaciones del revoltoso padre Madariaga.

En el mismo texto, yá concentrándose exclusivamente en los asuntos de su especialidad, Brión señala que "la escuadra española há estado tres días al frente de Margarita; ella se compone de veinte buques, tanto de guerra como de transporte, y está ahora fondeada en Cumaná". Nota: esta escuadra a la que se refiere Brión es precisamente la misma que transportará la llamada "segunda invasión" de Pablo Morillo a Margarita el 13 de julio de 1817.(detallada más adelante.)

Y continúa el informe: "Estoy en marcha para unirme con usted; llevo cuatro bergantines, siete goletas, dos faluchos, una balandra y nueve flecheras y cañoneras. Traigo tantos cañones, morteros, bombas, granadas, fusiles, pólvora y vestidos que espero no nos faltará nada”…”Mañana despacho un buque a buscar dos mil fusiles a Saint Thomas. También escribiré a Barbados cuando esté en las Bocas, pidiendo los seis mil fusiles que tenemos allí a nuestra disposición, pero téngame usted oro y plata que necesito para pagar de pronto un buque cargado de pólvora . fusiles etc.., que viene con la escuadra,y debe ser satisfecho en el momento que llegue. …Aguardo solamente al “Indio Libre” y a la “Diana” que estaban en los Cayos, Inmediatamente que lleguen remontaré.”
Termina su carta: "Crea usted que tengo mucha necesidad de dinero efectivo. Espero abrazar a vuestra merced dentro de diez o doce días. Soy vuestro amigo.- Luis Brión.

Relación de la Escuadra
Al final de su informe , se coloca la "lista de los buques de la escuadra que marcha (sic) sobre Guayana”: Bergantines: El "Invencible”, buque que monta 14 carronadas de a 24 y una pieza de a 36; corresponde a Buenos Aires- el "América Libre”, el “Indio Libre”, el “Conquistador” y el “Esparta”
Goletas: la “Mariño”, la “Cartago”, la “Venganza”, “Zaraza”, “Conejo” “Brión” y “Arismendi”.
Balandra: La “Aurora”.
Falucho: “El León”
Flecheras: “El Valle”, “Santa Ana”, “Venganza”, “San José”, “Perla”, “Piar”, “Alacrán”, “Juncar” (sic) y “Congreso”. 3 flecheras más del golfo.


Disturbios en Margarita.
Los margariteños se alarmaron con la salida de Brión desde Pampatar el 31 de mayo de 1817. No justificando (o desconociendo tal vez) las instrucciones de El Libertador para que la escuadra fuera conducida al Orinoco, creyeron los margariteños que por cobardía eran injustamente abandonados a su suerte ante la llegada de Morillo y en consecuencia, rotundamente se negaban a aceptar las razones para que Brión y su escuadra se retiraran de la isla en esos críticos momentos. Por eso protestaron con vehemencia e indignación, atacando con cierta violencia física al dispositivo de Brión. Por esta razón es que el Almirante en un párrafo de la misma carta que se muestra arriba, le dice a Bolívar con amargura: “La Margarita, después de todo lo que hé hecho por ella, me há pagado con ingratitud. Há formado una revolución contra mí y contra el Gobierno porque hacía ya dos meses que me estaba preparando para ir a reunirme a usted con esta bella escuadra en el Orinoco.”
“No pudiendo lograr nada contra mí, han sustraído mucha gente de los buques y de las flecheras que he podido traer conmigo a la expedición. Sin embargo, me quitaron una por la fuerza. Si yó no me hubiese conducido con tanta prudencia, habría habido en Margarita una horrible guerra civil”.

viernes, 16 de abril de 2010

ARMADA 87

















Batalla de San Félix (arriba) General Manuel Cedeño(centro)Brigadier Miguel de La Torre (abajo)


Llegada de Bolívar a Guayana. Encuentro con el general Piar. .

En la madrugada del 4 de abril de 1817, el Libertador cruzó el río Orinoco y tomó tierra en un sitio conocido como “desembarcadero del Jobito”. En las cercanías lo estaba esperando el general Manuel Piar quien sostuvo con el Jefe Supremo una corta conferencia y donde procedió a informar a éste sobre el desarrollo de las operaciones militares en el área.
Procedieron después hacia la Mesa de Angostura donde el ejército sitiador tenía instalado su Cuartel General.Posterioremente se les unió el general Manuel Cedeño quien había venido también a recibir al Libertador y presentarle sus respetos.

Las tropas de La Torre se embarcan para los Castillos.
De manera casual,esa misma noche del 4 de abril las tropas realistas del brigadier Miguel de La Torre se embarcaron en el puerto de Angostura y navegaron aguas abajo hacia los Castillos de Guayana que también estaban controlados por ellos, dejando en la ciudad las fuerzas necesarias para sostener las fortificaciones, garantizando con eso la posesión de la plaza que continuaba todavía muy estrechamente asediada por el lado de tierra.
Aparentemente, el plan de La Torre consistía en desembarcar en Los Castillos, penetrar hacia el sur y sorprender a las fuerzas de Piar por su flanco derecho, arrinconándolo sobre las márgenes orientales del Caroní. Con esta evolución aspiraba interrumpir o dificultar la comunicación de los patriotas con las Misiones Capuchinas, de donde extraían éstos valiosos recursos para continuar la guerra y que constituían por ahora su único y abundante centro de suministros.
Tanto Bolívar como sus acompañantes pernoctaron el el sitio de El Juncal( un lugar cercano a Angostura), donde estaba emplazado el campamento militar. En la mañana del día 5 de abril, los vigías informaron sobre la salida inesperada de la escuadrilla realista,por esa razón Bolívar, Piar y Cedeño decidieron-escoltados por la caballería- acercarse lo más posible a la ciudad sitiada, para observar los cambios de la situación. Pasaron primero por La Laja, una formación pétrea de gran extensión situada al sur de Angostura desde donde se podían detectar con facilidad los puntos resaltantes de la fortificación. Más tarde se acercaron a la ciudad por el lado este, donde se encuentra La Laguna, una extensión pantanosa y anegadiza,cubierta de manglares, que constituye un obstáculo muy considerable para quien intente penetrar a la ciudad por esa dirección, sobre todo en tiempo de lluvia. Una vez completado el reconocimiento,optaron por regresar al campamento principal de La Mesa situado a legua y media de distancia. Allí seguramente se tomaron el tiempo necesario para discutir una estrategia aplicable a corto y mediano plazo.

Piar marcha por tierra hacia Los Castillos.
La noticia de la salida española fue el detonante para que Piar decidiera la marcha inmediata de sus fuerzas hacia el Caroni,casi sin pérdida de tiempo. El asedio montado sobre la plaza de Angostura debería quedar entretanto bajo la responsabilidad y vigilancia de la caballería de Cedeño.

Se intenta recuperar el parque depositado en Barcelona.
Bolívar, después de separarse de Piar, volvió a pasar el Orinoco de sur a norte para tratar de encontrarse con aquellas tropas que disidentes de Mariño, y bajo la dirección de Arismendi, Bermúdez, Valdés, Zaraza, Armario y Soublette marchaban hacia el sur para ponerse a sus órdenes. La intención del Libertador habría sido la de llegarse de nuevo hasta la amenazada Barcelona, recuperar el valioso parque allí depositado y transladarlo con él a Guayana donde podría estar mas seguro frente a las embestidas realistas. Para eso había hecho reunir y conducía con él,una cantidad de bestias de carga (burros y mulas) que utilizaría para el debido acarreo de los materiales. Pensaba que de lograr este objetivo, no valdría la pena continuar aferrándose a una Barcelona sostenida hasta ahora con extremas dificultades.

Oficiales neogranadinos se unen al Libertador.
Pasando por El Pao (*), se presentaron a Bolívar un grupo de oficiales neo-granadinos quienes provenientes del Alto Apure donde habían sido duramente hostigados, decidieron bajar por el Orinoco para incorporarse a servir bajo sus órdenes. Entre estos figuraban Francisco de Paula Santander, Manuel Manrique, Francisco Conde , José María Córdova, Fernando Serrano , José María Vergara y otros más.
En el camino, antes de llegar a Aragua de Barcelona pudo conocer Bolívar la triste noticia sobre la pérdida de la Casa Fuerte . Demolido por la frustración y el desengaño, continuó no obstante avanzando hasta la Villa de Aragua para esperar allí a los grupos que, habiéndose separado de Mariño vendrían de seguro a reunirse con él. Con esos grupos pudo organizar un pequeño ejército que llegó a montar unos 700 efectivos.

Regreso de Bolívar a Angostura.
No habiendo yá mas nada que buscar en Barcelona, optó entonces ( el 20 de abril de 1817 )por regresarse con las tropas reunidas en Aragua de Barcelona hacia Angostura. En su tránsito por San Diego de Cabrutica recibió por fin una buena noticia,la del triunfo del general Manuel Piar en San Félix. Aceleraron por eso su marcha y el 27 de abril cruzaron el Orinoco, bajo un fuerte hostigamiento de las flecheras españolas que patrullaban el río. Fué por fin el 2 de mayo de 1817 cuando pudieron llegar a Angostura.

La batalla de San Félix.
Con relación a la batalla, en efecto, el 6 de abril la división patriota (de Piar) había pasado el Caroní por el sitio de Caruachi, continuando la marcha por la orilla derecha rumbo a San Félix. Buscaba afanosamente establecer contacto con las fuerzas de La Torre que sabía estaban muy cerca.Era importante combatirlas de inmediato, recién llegadas, antes de que pudieran fortalecerse con los medios locales y familiarizarse con el territorio. Finalmente el día 11 de abril de 1817 se produce el encuentro entre ambos ejércitos en el llamado banco o mesa de Chirica situado al sur del pueblo(San Félix ) flanqueando el llamado cerro de El Gallo.
Indiscutiblemente, la victoria de San Félix correspondió a los patriotas gracias al brillante desempeño táctico del general Piar y a su conocimiento del terreno.
La Torre derrotado y casi solo, en la madrugada del 12, debió embarcarse sigilosa y apresuradamente para buscar refugio en la isla Fajardo (al frente) y luego en las fortalezas, bajando el río. Según el parte de los patriotas, los realistas tuvieron una pérdida muy numerosa,unos 593 muertos y 497 prisioneros(entre estos 200 españoles europeos, plazas de los regimientos Barbastro, Castilla y Victoria).

Ejecución masiva de prisioneros.
Según registros históricos, estos 200 prisioneros europeos fueron posteriormente pasados por las armas (alanceados),sin apelación (15 de abril de 1817. Amarrados, fueron sacados de cinco en cinco,despojados de sus prendas militares y conducidos a empellones hasta un bosquecillo cercano,donde eran a sangre fría ejecutados con un certero golpe de lanza en mitad del pecho,en lugar de ser fusilados. Las municiones aparentemente eran muy escasas para ser "desperdiciadas" con prisioneros.
Los gritos de los ajusticiados se escuchaban a distancia para desesperación de los otros condenados que esperaban su turno al bate y escuchaban claramente los postreros alaridos de los moribundos. De nada valían los pedidos de clemencia, aunque se afirma que la mayoría de los españoles morían como fieros leones con arrogancia y altanera presencia, mostrando genio y figura hasta la sepultura. Los españoles nunca fueron muy dados a pedir misericordia.
Los cuerpos, a veces sin terminar de morirse, eran simplemente arrojados en un profundo barranco,donde pronto terminarían siendo pasto de los zamuros, perros y otras alimañas. Nadie se ocupó de darles a éstos una cristiana sepultura. Años después de la batalla, todavía se podían apreciar osamentas diseminadas en los claros del campo, blanqueándose bajo el ardiente sol canicular.
Entre los oficiales sacrificados figuró el bravo coronel Nicolás Ceruti, recién nombrado comandante del hasta ahora invencible "Cachirí" y quien había sido severamente reprendido por Morillo por haber desplazado de manera arbitraria y por propia iniciativa al gobernador español de la plaza de Angostura,coronel Lorenzo FitzGerald, bajo supuestos cargos de incompetencia. Ceruti había estado ocupando la comandancia de las fortalezas de Guayana antes de la llegada de La Torre a Angostura (desde San Fernando). Por intrigas con Fitz-Gerald, Ceruti se autoproclamó gobernador y sometió al titular a arresto domiciliario. Le correspondió a La Torre restablecer a Fitz-Gerald en su cargo, mientras decidía enviar a Ceruti a comandar tropas en campaña.
De esta carnicería con los rendidos,solo perdonaron a los jóvenes cornetas (2) y al cirujano. A los prisioneros no-europeos ,casi todos soldados "reinosos" (de Nueva Granada) se les concedió la vida con la condición de que "aceptaran" unirse a las tropas patriotas,lo cual todos ellos hicieron sin el menor titubeo. Así era la guerra en esos tiempos,además tontos no eran los criollos de esa época. Pensaban inteligentemente que era preferible ser recluta "pasado al enemigo" que soldado alanceado.
Estos procedimientos contra los prisioneros eran todo lo cruel que uno se pueda imaginar. Los aplicaban tanto los patriotas como los realistas y si lo hacían así era porque no existía en esos momentos otra alternativa viable. Primero, estaba vigente en Venezuela el decreto de guerra a muerte para los españoles y canarios, quienes se desquitaban aplicando las mismas medidas a sus contrarios o un poquito peor. El conflicto en Venezuela no tenía todavía las características de guerra regular como sucedía en Europa.
Otra razón de peso era la dificultad para manejar a los prisioneros. Se necesitaban muchos soldados (que siempre eran escasos) para vigilar a un contingente enemigo rendido y obstinado.No existían instalaciones para mantenerlos encerrados, y conservarlos juntos era muy riesgoso, porque una reacción coordinada de ellos podría fácilmente llegar a superar a sus custodios.
Dejarlos libres "bajo palabra" no se estilaba, eso se practicó mucho después cuando la guerra se convirtió en una institución regular, donde los prisioneros se comprometían solemnemente a no tomar las armas contra su enemigo hasta tanto no hubiesen sido formalmente canjeados. Quien violara este compromiso era ejecutado sumariamente en cualquiera de los lados.
Otro problema difícil era alimentar y cuidar a los presos, no teniendo recursos el apresador ni siquiera muchas veces para alimentar y cuidar a su propia gente.
Solo quedaba entonces la dudosa posibilidad de incorporarlos a las propias fuerzas, cosa que no era aplicable con los españoles y canarios,casi por definición. Los prisioneros que eran de orígen criollo y que generalmente militaban reclutados contra su voluntad, a veces se podían utilizar en las propias filas, pero eso generaba también muchas restricciones, y no siempre eran confiables. Aunque no se crea, muchísimos criollos eran fanáticamente leales a la corona, mucho más inclusive que los propios soldados españoles
De lo antes expuesto, no es difícil entender y justificar el porqué de las ejecuciónes masivas de prisioneros después de una batalla.
En todos caso,la tarea de los ejecutores há debido de ser muy ingrata. Matar a sangre fría, tal vez a disgusto y en forma continuada a un numeroso grupo de personas(soldados inocentes en teoría, que debían obligatoriamente hacer la guerra para cumplir con un deber militar),era sin duda algo horriblemente desagradable.
No es lo mismo matar (o morir) en la euforia del combate,con la sangre caliente y el espíritu exaltado, que ultimar a mansalva a desgraciados prisioneros, que como ovejas enviadas al matadero, nada podían hacer para salvarse.

La Torre remonta el Orinoco hasta Angostura.
El brigadier La Torre permaneció protegido en Los Castillos soportando el sitio de las fortalezas que los patriotas-por el lado de tierra-decidieron mantener con mucha intensidad. El día 20 de abril, decidió regresar por vía fluvial a asumir su responsabilidad en Angostura que todavía continuaba sitiada(**).El 1° de mayo, los realistas conocieron del éxito de Aldama en Barcelona y aprovechan para mandarle con un capellán, una petición de auxilio. Ya no quedaba en la plaza nada que comer, apenas cacao crudo y aguardiente. Tuvieron que matar 15 caballos para racionar a la tropa, mientras que La Torre tuvo que conformarse con un gato que lograron capturar. Los pocos burros que tenían tuvieron también que beneficiarse para repartirlos a la hambrienta población civil. Solamente se reforzaba la alimentación,con algo de condimentos, papelón, verduras y casabe, cuando con dificultad llegaba alguna goleta procedente de las Fortalezas. No quedaba en la plaza "perro ni gato que no fuera comido",escribió en sus memorias un oficial de La Torre (***). El 7 de julio se presentó una epidemia de "vómito negro"(fiebre amarilla)y hubo necesidad de suspender toda clase de trabajos en las fortificaciones porque no había nada de comida para las tropas. El 12de julio se corrió la (falsa) noticia de que el general Morillo venía en camino a auxiliar la plaza. Pero también se supo de la llegada del "corsario" Brión al frente de las fortalezas (ensenada de Casacoima). Esta si que era entre todas una noticia grave, y no era falsa.
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Piar por su parte también había decidido desde San Félix (un día antes de que lo hiciera La Torre) regresar por tierra a Angostura, atendiendo a una llamada urgente de Cedeño (**** ), dejando eso sí, parte de sus tropas para continuar manteniendo el sitio de Los Castillos de Guayana. Llegó Piar al campamento de La Mesa el día 23 de abril. En la noche de ese día 23 se recibió en Angostura la trágica noticia de la pérdida de la Casa Fuerte de Barcelona el pasado 7 de abril.

El Libertador asume el mando en Guayana.
Como se señaló antes, el día 2 de mayo de 1817 Bolívar regresa a Guayana, esta vez al frente de sus propias tropas. A partir de ese momento, asume el Libertador en forma plena la conducciòn de las operaciones políticas y militares. Eventos muy importantes para la República se sucederán ahora, y que colocarían a la Guayana y a Angostura misma como epicentro de los destinos nacionales. La historia reseña tales eventos en forma metódica y muy detallada. El proceso contra el general Piar es uno de ellos. La campaña por el Orinoco hacia los llanos centrales es otro. El Congreso de Angostura , la campaña de la Nueva Granada, la creación de la República de Colombia vendrán después de manera sucesiva y sistemática. Todos estos eventos que mencionamos aquí solo tangencialmente (*****), fueron de una importancia capital dentro de los lineamientos globales que se planteaba el Libertador, como ruta segura para consolidar la independencia.

(*)El Pao es un pequeño pueblo situado en una encrucijada de caminos al sur de Pariaguán.

(**)Angostura estaba completamente sitiada por los lados de tierra. Sin embargo los realistas dominaban completamente el río frente a la plaza, y estaban además en capacidad de desplazarse sin restriciones por la vía fluvial. La escuadrilla patriota(Brión)no había llegado todavía al Orinoco.

(***)En las memorias del capitán español Rafael Sevilla se narra con mucha precisión,la situación reinante en la plaza de Angostura por causas del bloqueo terrestre impuesto por las tropas de Piar y de Cedeño.

(****)El general Cedeño supo por un prisionero capturado a los realistas, que se esperaba la supuesta llegada de auxilios de parte del general Morales, desde Barcelona. Por eso se alarmó y mandó a llamar a Piar para que lo reforzara cuanto antes.


(*****)Esta es una presentación relacionada con la Armada. Por eso a propósito se evita entrar muy profundamente en otros aspectos históricos, a menos que sea absolutamente necesario.Hacerlo alargaría mucho el trabajo y desviaría la atención hacia otros tópicos.

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martes, 13 de abril de 2010

ARMADA 86












Fortin del Morro (abajo) Monumento a Eulalia Buroz (arriba) Ruinas de la Casa Fuerte (centro)

El Morro de Barcelona.
Al amanecer del 18 de febrero de 1817 apareció nuevamente la escuadrilla realista de Chacón en plan de ataque. El asalto lo dirigió esta vez- personalmente- el teniente de fragata José Guerrero, quien al frente de un grupo de incursores y apoyado por la artillería de sus buques, heroicamente se acercó a la línea de las flecheras patriotas, arremetió contra ellas y logró apresar una embarcación dominando a sus tripulantes. Luego se retiró en órden con su presa acompañado de su mismo destacamento, desembarcó en el Morro,asaltó el fuerte,desalojó a sus defensores e inutilizó el cañón que allí estaba emplazado.
Una fuerte columna de refuerzo fué enviada por Bolívar contra la incursión realista, por eso Guerrero optó por retirarse, reembarcando a su gente y abandonando la flechera que había capturado. El fuerte de El Morro fué recuperado nuevamente por los patriotas de la columna .
El día siguiente (19 de febrero) Guerrero intentó un nuevo desembarco pero esta vez se estrelló contra la defensa republicana establecida en el Morro mientras soportaba los cañonazos procedentes de los buques de Antonio Díaz. Los españoles sufrieron muchas bajas y desistieron por los momentos de su ataque al Morro.
El capitán Chacón decidió comisionar a Guerrero con sus pequeños buques a Cumaná a solicitar nuevos refuerzos, mientras que él mismo permanecía con sus buques mayores bloqueando la costa. Entretanto el brigader Del Real acercó su ejército a Barcelona ( 21 de febrero), ocupando una nueva posición en El Juncal donde suponía tener mayores ventajas para su plan de ataque y de donde sus comunicaciones con las fuerzas navales podrían ser mas expeditas.

Frente a los preparativos de los realistas, Bolivar se convenció de que el ataque se produciría de un momento a otro. Ante esta circunstancia, ordenó evacuar la fortificación del Morro y concentrar todas las fuerzas dentro del perímetro de la ciudad. Con todo eso,se percataba del grave peligro que corría, pues sabía claramente que sus fuerzas no serían lo suficientemente adecuadas para rechazar el ataque de los realistas, por lo que continuaba aferrándose a la ayuda de Mariño como su única salvación.
El 28 de febrero de 1817 los realistas efectuaron un desembarco masivo en el Morro de Barcelona aprovechando su abandono por los patriotas. Allí construyeron algunos atricheramientos e instalaron una batería en el istmo , protegida por una estacada y un foso abierto transversalmente.
El avance español por tierra no progresó con suficiente rapidez, le faltó agresividad y “garra” al general Del Real. El ataque que esperaba Bolívar “en cualquier momento” no se llegó a efectuar. En lugar de atacar de una vez, los españoles,sabiendo de la llegada de refuerzos para los patriotas, retrocedieron hacia Píritu.
En cuanto a la posesión del Morro por las fuerzas realistas, se creyó ahora oportuno terminar con ella y de una vez por todas. Durante los días 2 y 3 de marzo de 1817, los republicanos ejecutaron un contra-ataque coordinado con fuerzas de mar y de tierra.Una columna de infantería de marina, al mando del capitán de fragata Agustin Armario atacó de frente a lo largo del istmo haciendo retroceder a los españoles hacia lo alto del Morro, mientras que las flecheras de Antonio Díaz, bajo fuego de artillería, desembarcaban tropas por uno de los flancos. Los ocupantes realistas tácticamente superados, fueron obligados a retirarse, embarcándose con muchas dificultades y sufriendo pérdidas importantes. La escuadrilla de Chacón , esta vez sensiblemente magullada, optó por refugiarse en la cercana Cumaná.

Los auxilios de Mariño.
Mariño después de plantear por adelantado algunas condiciones a su favor, decidió por fin acudir en ayuda de la amenazada Barcelona. Avanzó rápidamente con 1200 efectivos y después de obligar a las tropas españolas a retroceder hacia Píritu, entró en Barcelona a tiempo “para rescatar” al acosado Jefe Supremo. La ejecución de esta maniobra le correspondió personalmente al general José Francisco Bermúdez, quien desde ese momento aceptó una definitiva reconciliación con el Libertador, de quien había estado distanciado desde los sucesos de Güiria, aquel 22 de agosto de 1816. Nunca más se presentaría rompimiento entre ellos.

Poco después Mariño entró en desacuerdos con Bolivar en relación a la continuación de las operaciones y respecto al destino y empleo de las tropas por ellos reunidas. No habiendo entendimiento entre ambos jefes, Mariño arrogante optó por retirarse con sus fuerzas, dejando a Bolívar obrando por su propia cuenta.
Barcelona continuaba amenazada, esta vez por el brigadier Juan Aldama, un militar experto,reconocido por su ferocidad, y que había sido designado por Morillo para comandar ese mismo ejército, en reemplazo del brigadier Del Real, aparentemente relevado del mando por incompetente. Antes que a Aldama para asumir ese cargo, Morillo había propuesto al veterano brigadier Morales, sin embargo esta última proposiciòn fue "protestada" por el ejército, que no mostraba en esos momentos, ninguna aceptación o simpatía por el candidato(*).

Bolivar se retira hacia el sur.
Nuevamente ignorado por Mariño, el Libertador decidió ausentarse de Barcelona. El 25 de marzo de 1817 salió hacia el sur, buscando reunirse con Piar en Guayana.
La ”Casa Fuerte” fue dejada bajo la responsabilidad del general Pedro María Freites (**), quien valiente y voluntariamente se ofreció a mantener la pequeña guarnición , confiando principalmente en los auxilios que supuesta y oportunamente habrían de prestarle las fuerzas de Santiago Mariño.
La escuadrilla sutil del capitán Antonio Díaz que hasta ahora había defendido las bocas del Neverí, debió desplazarse hacia Margarita a ponerse a las órdenes del Almirante Brión, quien lo necesitaba con urgencia pues estaba organizando la gran expedición hacia el Orinoco.

Toma de la Casa Fuerte.
La plaza de Barcelona finalmentse es atacada con extremada fiereza por las tropas de Aldama,quienes a “toque de degüello” ni piden ni dán cuartel. Conociendo la suerte que les espera, los defensores no tienen mas remedio que luchar hasta el final. Condenados como están, de nada les sirve yá optar por rendirse.
Mariño desde Aragua de Barcelona titubea inexplicablemente en conceder los auxilios suplicados por Freites con marcada desesperación. Al fin -parsimonioso como siempre- decide enviar a Monagas y a Rafael Urdaneta a prestar la ayuda. Pero éstos llegan tarde, demasiado tarde. Después de 5 días de fiera lucha, Aldama había tomado yá la Casa Fuerte a sangre y fuego(7 de abril de 1817), ajusticiando a más de 700 personas concentrados dentro de la fortaleza y a otras 300 refugiadas en las iglesias de la ciudad.


(*) El general realista Morales no era bien visto por las tropas españolas. Se le achacaba la derrota de su división en El Juncal poco tiempo atrás. En el fondo, existía cierto celo de los militares profesionales del ejército respecto a Morales, a quien consideraban un sargentón tropero y rudo formado en los campos de batalla al lado de Boves,sin ninguna preparación formal, pero con perfecto dominio de la guerra en Costa Firme.El hecho de ser natural de las Islas Canarias y nó peninsular, de haber sido pulpero en Piritu y de haber comenzado como soldado raso en Venezuela, lo hacían blanco de maliciosa discriminación entre la selecta oficialidad española que llegó con Morillo. Sin embargo,debe reconocerse que Morales fué el mas eficiente de los generales españoles que actuaron en Venezuela, el más consecuente con su causa y quien se mantuvo luchando por su Rey y su país hasta el final de la guerra. Llegó a ser Capitán General en Venezuela y Mariscal de Campo de los ejércitos reales.Su personalidad era la de un ser extremadamente seco e insociable,solitario, de poco hablar y reacio a fraternizar con sus propios oficiales, de quienes desconfiaba veladamente en lo personal. Recuerda mucho a Juan Vicente Gómez y a sus "generales chopos de piedra", que en algunos casos no sabían ni expresarse correctamente,eran muy poco apegados a los adelantos de las ciencias militares, pero que que en las peleas eran unos ases difíciles de igualar.

(**)Marx continúa echando sombras sobre la conducta de El Libertador. Dice en su escrito yá mencionado que "Por órden de Bolívar se cavaron algunas trincheras inapropiadas para defender contra un ataque serio una guarnición de 1000 hombres. Bolívar abandonó la posición en la noche del 5 de abril, tras comunicar al coronel Freites en quien delegó el mando, que buscaría tropas de refresco y volvería en breve. Freites rechazó un ofrecimiento de capitulación, confiando en las promesas, y después fué degollado por los españoles, al igual que toda la guarnición"